Basamos el tratamiento de las aguas residuales orgánicas, en la aplicación de un aditivo
inorgánico, especialmente formulados en base a un sulfato de cobre combinado con un
quelato, que mantiene al cobre en suspensión.
BIODEX es un regulador de bacterias fabricado a partir de un Quelato de Cobre orgánico,
que permite al cobre mantenerse en contacto con las bacterias, las algas y
microorganismos durante largos períodos de tiempo.
El contacto de BIODEX con las Bacterias Anaeróbicas, permite inhibirlas, reduciendo la
producción de gases amoniacales y la presencia de lodos orgánicos. A diferencia de
sulfato de cobre común y corriente BIODEX no se precipita ni se sedimenta. Este contacto
continuo de cobre quelatado sobre las bacterias aeróbicas y anaeróbicas influirá sobre
las bacterias facultativas que cambiaran sus funciones de anaeróbicas a aeróbicas,
acelerando así la actividad de la licuefacción del depósito a tratar.
BIODEX permanece disperso de forma uniforme en el agua durante un período de tiempo más
largo para proporcionar una protección continua en contra de los microorganismos
patógenos, debido a que las concentraciones de cobre se mantienen de forma adecuada
y estable.
La carga electroquímica del cobre quelatado, permite, generar el movimiento de sólidos
desde el fondo del tanque hacia la superficie, permitiendo una completa suspensión de
los sólidos y una homogeneización del contenido del depósito séptico. De esta
manera se evita la deposición de sólidos en el fondo, acelerando a la vez la
descomposición del gas de amoniaco que emana del tanque séptico transformándolo en
nitrógeno gracias a la aceleración bacteriana se logra descomposición de materia
orgánica.
BIODEX previene los daños en la infraestructura causados por la acumulación de gases,
inhibiendo las bacterias responsables de la producción de estos. Finalmente BIODEX
mejora la calidad del efluente, reduciendo el nivel de coliformes fecales y la carga
de DBO a un punto donde se le puede considerar inofensivo, estando muy por debajo de las
normas existentes. La adición de este poderoso quelato inorgánico permite que el cobre
se mantenga en contacto con las bacterias, algas y microorganismos
durante largos periodos de tiempo con menos de 1 ppm.
BIODEX es usado en el tratamiento de las aguas residuales de tipo orgánicas provenientes
de fraccionamientos, rastros, empacadoras, industrias lácteas, hoteles y restaurantes ;
lagunas de oxidación; fosas séticas y plantas de tratamiento, entre otros
segmentos que generen descargas de tipo orgánico. Este contacto continuo de BIODEX sobre
las bacterias aeróbicas y anaeróbicas influirá sobre las bacterias facultativas que
cambiaran sus funciones de anaeróbicas a aeróbicas, acelerando así la
actividad de la licuefacción del depósito a tratar.
SEPTIDEX se fabrica pensando en la comodidad y practicidad de aplicación, sin dejar de
ser efectivo en su función como nutriente de las bacterias aerobicas; responsables de la
licuefacción y degradación de los sólidos orgánicos; ejerciendo al mismo tiempo
una importante y efectiva acción inhibidora, sobre las bacterias anaeróbicas;
responsables de la generación de gases amoniacales y lodos orgánicos.
La aplicación sistemática y regular de SEPTIDEX garantiza un resultado óptimo del
tratamiento de su Microplanta o Fosa Séptica, obteniendo como resultado final un agua
apta y dentro de NOM.
BIOHOME es un producto específico para combatir contaminación por malos olores en
habitaciones o cuartos que provienen del sistema de drenaje interno.
La principal característica de BIOHOME es la de ser un producto que no requiere ser
diluido; se entrega listo para ser aplicado en las rejillas del drenaje; en lavabos y
regaderas; esto por medio de un atomizador.
Las aguas residuales, en contacto con BIOMARINE durante un intervalo de tiempo adecuado
logran una reducción notoria en cuanto a la presencia de malos olores.
Para lograr una reducción de sólidos orgánicos, es necesario que lagua residual sea
sometida a cierto tiempo de confinación, siendo necesario contar con tanques de
residencia, con capacidad suficiente para contener lodos durante treinta y seis horas
como
tiempo mínimo.
